Skip to content Skip to footer

Derechos LGBTQ+ en juego en el Supremo de EE.UU.: por qué Puerto Rico debe estar alerta

Decisiones inminentes del Supremo federal podrían marcar el futuro de los derechos de la comunidad

SAN JUAN, Puerto Rico

REDACCIÓN PSM

Mientras en Puerto Rico diversas organizaciones defienden los avances en equidad de género y derechos LGBTQ+, el Tribunal Supremo de Estados Unidos está considerando este año cuatro casos que podrían tener un profundo impacto en los derechos y la vida de estas comunidades. Las decisiones que tome el máximo foro judicial en las próximas semanas marcarán precedentes que, de ser desfavorables, podrían fortalecer las agendas conservadoras en la Isla, tal como ha ocurrido en otros temas.

Los casos en evaluación incluyen una impugnación a la ley de Tennessee que prohíbe la atención médica afirmativa de género a menores trans; una demanda por supuesta discriminación contra una mujer heterosexual; un caso que cuestiona si los planes de seguros deben cubrir medicamentos para la prevención del VIH (PrEP); y otro que busca permitir que los padres puedan excluir a sus hijos de lecciones escolares que incluyan libros con temas LGBTQ+.

Aunque algunos fallos ya se han emitido, la mayoría se esperan hacia el cierre del término del Tribunal este mes de junio.

Prohibición de cuidado afirmativo en Tennessee

Uno de los casos más relevantes es L.W. v. Skrmetti, que busca anular la ley de Tennessee que prohíbe el uso de bloqueadores de pubertad y terapia hormonal para menores trans. La demanda fue presentada por familias con hijas e hijos trans y un médico, con el respaldo de la administración de Joe Biden, aunque bajo el presidente Donald Trump el gobierno federal cambió de posición y ahora respalda la ley estatal.

Organizaciones como Lambda Legal y la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) argumentan que la ley viola las garantías constitucionales de igualdad y debido proceso, además de la sección 1557 de la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA), que prohíbe la discriminación por sexo en el cuidado de salud.

Aunque algunos fallos ya se han emitido, la mayoría se esperan hacia el cierre del término del Tribunal este mes de junio. Ilustración | Internet

Aunque un juez federal bloqueó inicialmente la ley, un tribunal de apelaciones permitió su implementación. El Tribunal Supremo ahora debe decidir si ratifica la prohibición o la revoca, lo que tendría implicaciones no solo para Tennessee sino para otros estados que buscan limitar los derechos de menores trans. La comunidad LGBTQ+ mantiene un optimismo cauteloso ante el fallo.

Discriminación “inversa” en el lugar de trabajo

En Ames v. Departamento de Servicios Juveniles de Ohio, el Tribunal falló unánimemente a favor de una mujer que alegaba haber sido discriminada por ser heterosexual. El caso cuestionaba si las personas de grupos mayoritarios (heterosexuales o blancas) deben enfrentar un estándar probatorio más estricto que otros demandantes de discriminación.

La decisión establece que todos los casos de trato desigual bajo el Título VII de la Ley de Derechos Civiles deben evaluarse con los mismos criterios, independientemente de la pertenencia a un grupo mayoritario o minoritario.

Aunque el caso en sí no implicaba directamente a la comunidad LGBTQ+, los precedentes que siente el Tribunal sobre el alcance de las protecciones antidiscriminatorias podrían tener efectos sobre futuras demandas en este ámbito.

Acceso a medicamentos para la prevención del VIH

Otro caso crucial es Kennedy v. Braidwood Management, en el que empresas de Texas alegan que el mandato federal que obliga a los seguros de salud a cubrir medicamentos como el PrEP viola su libertad religiosa, por considerar que fomenta “conductas homosexuales” y otras prácticas que desaprueban.

Aunque un tribunal federal inicial falló a favor de las empresas, limitando la aplicación del mandato, el gobierno federal apeló. Ahora, el Supremo decidirá si el mandato de cobertura para servicios preventivos esenciales como el PrEP puede mantenerse.

De ratificarse la exención religiosa, podría abrir la puerta para que aseguradoras y empleadores en todo Estados Unidos —y eventualmente en Puerto Rico— limiten la cobertura de medicamentos vitales para la prevención del VIH, lo que tendría un impacto directo en la salud pública.

Padres buscan excluir libros LGBTQ+ de las escuelas

Finalmente, en Mahmoud v. Taylor, un grupo de padres religiosos en Maryland busca reinstaurar el derecho a excluir a sus hijos de lecciones que incluyan libros con contenido LGBTQ+. El distrito escolar había permitido tales exclusiones, pero ante el aumento de solicitudes y las consecuencias de estigmatización para los estudiantes LGBTQ+, eliminó esa opción.

Los padres demandaron alegando que sus derechos religiosos estaban siendo vulnerados, pero hasta ahora tribunales inferiores han rechazado su reclamo. El Supremo escuchó los argumentos el pasado abril.

Entre los libros en cuestión se encuentran títulos como Pride Puppy y Born Ready: The True Story of a Boy Named Penelope. Las y los autores han defendido su inclusión, subrayando que es vital que niñas, niños y adolescentes LGBTQ+ vean representadas sus experiencias en el aula.

Logo | Internet

Lo que está en juego para Puerto Rico

Aunque estos casos se originan en estados de EE.UU., es crucial que en Puerto Rico permanezcamos atentos. Grupos conservadores en la Isla suelen seguir de cerca los desarrollos en el Tribunal Supremo federal para intentar replicar iniciativas que restrinjan los derechos LGBTQ+. Temas como el acceso a libros en las escuelas, el reconocimiento de la identidad de género en menores o la cobertura de salud inclusiva son parte del debate público local y podrían verse impactados por estas decisiones.

La comunidad LGBTQ+ y sus aliades en Puerto Rico deben prepararse para posibles intentos legislativos o judiciales que busquen limitar derechos adquiridos, utilizando como justificación los precedentes que podría sentar el Supremo federal.

Leave a comment