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Factores que perpetúan la pobreza en lesbianas y bisexuales

Un estudio analiza cómo la educación, raza, maternidad y estigma afectan a estas comunidades en Estados Unidos

NUEVA YORK, NY

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Un reciente estudio publicado en Women’s Health Issues (2024) las mujeres cisgénero lesbianas y bisexuales enfrentan tasas desproporcionadamente altas de pobreza, aunque las causas varían entre ambos grupos. Según los datos analizados, el 54% de las mujeres bisexuales vive bajo el umbral de pobreza, comparado con el 41% de las lesbianas.

Diferencias en los determinantes de la pobreza

El análisis identifica varios factores clave que explican estas desigualdades. En ambos grupos, la falta de estudios superiores y la pertenencia a comunidades racializadas, como las mujeres negras y latinas, aumentan significativamente las probabilidades de pobreza. Sin embargo, las experiencias específicas de cada grupo introducen matices importantes.

En ambos grupos, la falta de estudios superiores y la pertenencia a comunidades racializadas, como las mujeres negras y latinas, aumentan significativamente las probabilidades de pobreza. Ilustración | Adobe Stock

Las mujeres lesbianas, por ejemplo, enfrentan mayores barreras económicas cuando presentan una expresión de género masculina o cuando sufren estigmatización vinculada directamente con su orientación sexual, particularmente en el ámbito laboral. Por otro lado, las mujeres bisexuales, aunque experimentan discriminación, suelen reportar que esta ocurre en contextos más generales y menos relacionados con su sexualidad.

La maternidad como factor crítico

Para las mujeres bisexuales, la maternidad emerge como uno de los mayores predictores de pobreza. Aquellas con hijos menores de 18 años tienen hasta cinco veces más probabilidades de vivir en pobreza, un impacto mucho mayor al que se observa en lesbianas. Este hallazgo subraya la importancia de políticas públicas dirigidas a madres trabajadoras en las comunidades LGBTQ+.

Hacia soluciones específicas

El estudio concluye que abordar la pobreza en lesbianas y bisexuales requiere estrategias diferenciadas que reconozcan las particularidades de cada grupo. Ampliar las protecciones contra la discriminación laboral, especialmente para lesbianas con expresiones de género no normativas, y promover programas de apoyo económico para madres bisexuales son algunos de los caminos sugeridos.

Este análisis refuerza la necesidad de enfoques interseccionales que integren factores como género, orientación sexual y raza para combatir la desigualdad económica en las comunidades LGBTQ+.

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