Trump dijo que instruyó a los republicanos para que comenzaran a abordar los temas trans “alrededor de una semana antes de las elecciones” del 2026
WASHINGTON, DC
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El Partido Republicano ya se está preparando para hacer campaña contra los derechos de las personas trans en la próxima temporada electoral, si se deben creer las recientes declaraciones del presidente Donald Trump. La semana pasada, Trump hizo referencia en dos ocasiones a las mujeres y niñas trans que juegan en ligas deportivas femeninas, una práctica que está intentando ilegalizar a nivel federal, durante reuniones en la Casa Blanca, y dejó entrever el papel que podría desempeñar atacar a este grupo en el próximo ciclo electoral importante.
El 13 de marzo, Trump ridiculizó a las mujeres trans en el deporte durante comentarios con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte. En esa reunión, Trump dijo a los miembros de la prensa que los demócratas tienen “malas políticas” sobre los derechos trans, burlándose de lo que consideraba “hombres siendo capaces de jugar en deportes de mujeres” y comentando que los republicanos podrían utilizarlo nuevamente como un tema divisivo. “De alguna manera, quiero que ellos (los demócratas) sigan haciéndolo [hablando sobre los atletas trans], porque no creo que puedan ganar una carrera”, dijo Trump. Agregó que había dicho a otros republicanos: “No saquen ese tema, porque no hay elecciones ahora mismo. Pero alrededor de una semana antes de las elecciones, sáquenlo, porque no pueden perder”.
Antes de esos comentarios, Trump también se quejaba de que “todo es transgénero, todo el mundo es transgénero” durante una reunión del 12 de marzo con el primer ministro irlandés Micheál Martin, repitiendo su declaración previa a Time de que los derechos trans “han destrozado nuestro país”. Trump continuó afirmando que “por eso ganamos las elecciones” y que las mujeres trans “están perjudicando a las mujeres cisgénero muy gravemente». (Trump había hecho previamente la afirmación falsa de que las atletas trans son un peligro físico para las mujeres cis durante su discurso conjunto al Congreso a principios de marzo.)
Si Trump realmente les dijo a los legisladores republicanos que no tocaran el tema de las atletas trans hasta más cerca de las próximas elecciones, parece que nadie le prestó atención. (No está claro a qué elecciones se refería Trump, aunque algunas elecciones para gobernadores y legislaturas estatales se llevarán a cabo este año en EE. UU. antes de las elecciones intermedias de 2026.) En particular, la representante de Carolina del Sur, Nancy Mace, ha convertido la transfobia flagrante en su marca personal, emitiendo numerosas convocatorias en redes sociales para excluir a las mujeres trans de los espacios femeninos con su lema adoptado “Mantén la línea”.
El propio Trump ha convertido la prohibición de los deportes trans en una prioridad en sus primeros dos meses en el cargo, utilizando el espectro de las atletas trans para justificar congelamientos masivos de fondos para múltiples sistemas universitarios. En las elecciones de 2024, los republicanos —con Trump a la cabeza— sitiaron a los demócratas por el tema de los deportes inclusivos para trans, gastando millones en anuncios que presentaban a la ex vicepresidenta Kamala Harris como una radical de extrema izquierda en cuanto a los derechos trans.
En realidad, Harris y muchos otros candidatos demócratas evitaron en su mayoría hablar sobre las personas trans; al final de la campaña, después de que los republicanos ya habían puesto a los demócratas a la defensiva, Harris declaró solo que su administración “seguiría la ley” respecto al trato de las personas trans encarceladas.
Los comentarios de Trump la semana pasada se dieron en medio de la especulación continua de que los demócratas carecen de un plan coherente para avanzar los derechos trans. Desde la derrota de Harris, algunos demócratas han aceptado el marco republicano de que su partido es demasiado radical, aparentemente incluyendo a la representante de Delaware, Sarah McBride, la primera mujer trans en servir en el Congreso.
Una semana después de los comentarios de Trump, McBride —quien ella misma ha sido objetivo de comentarios denigrantes por parte de Mace y otros legisladores del GOP— confirmó a NOTUS que les dijo a otros demócratas que deben “crear más espacio en nuestra tienda” e “incluir personas que tengan una gama de pensamientos” sobre los derechos de las personas trans sin “excomulgar” a los disidentes.
“Una opción binaria entre estar completamente a favor o completamente en contra no es constructiva para nadie… impide el camino tan necesario hacia la victoria electoral, ganar corazones y mentes y, lo más importante, lograr avances”, le dijo McBride a NOTUS.
McBride compartió esta perspectiva, según los informes, con el representante de Massachusetts, Seth Moulton, uno de varios demócratas que afirmaron que Harris había perdido por los derechos trans pocos días después de las elecciones de 2024. Moulton dijo a NOTUS que los demócratas del Congreso, incluso ahora, no han mantenido conversaciones formales sobre cómo tratar los temas trans en general, “porque la gente todavía tiene miedo de hablar de ellos”. Esa mentalidad no se limita a la Cámara de Representantes.
El gobernador de California, Gavin Newsom, un posible candidato para la nominación presidencial demócrata en 2028, fue en su momento un defensor vocal de las causas LGBTQ+, como la igualdad matrimonial. Pero Newsom parece haberse retirado completamente del tema de los deportes inclusivos para trans, cediendo a los propagandistas de derecha Charlie Kirk y Michael Savage sin hacer mucho ruido en los dos primeros episodios del podcast de Newsom a principios de este mes.
A pesar de la aparente desorganización continua dentro del partido, los demócratas del Senado bloquearon con éxito un proyecto de ley patrocinado por los republicanos hace varias semanas que habría prohibido a las mujeres y niñas trans participar en ligas deportivas femeninas en escuelas K-12 y universidades públicas. Aún está por determinarse si será posible una repetición de esta actuación.