En el contexto LGBTQ+ la micro-infidelidad puede tener efectos aún más intensos
SAN JUAN, Puerto Rico
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En tiempos donde las redes sociales y las conexiones digitales multiplican las oportunidades de interacción, surge un nuevo fenómeno que pone a prueba la confianza en las relaciones de pareja: la micro-infidelidad. Aunque sus manifestaciones puedan parecer inofensivas, expertos advierten que este comportamiento puede afectar profundamente los vínculos amorosos, incluidos los de la comunidad LGBTQ+.
La micro-infidelidad abarca “pequeños comportamientos que son difíciles de señalar o probar, pero que indican violaciones de los límites en una relación”, explicó Molly Burrets, psicóloga clínica especializada en terapia de parejas, en entrevista con CBS News. Estos gestos incluyen desde darle “me gusta” a las fotos de personas atractivas en redes sociales hasta compartir detalles íntimos con un colega o amigo, o mantener un coqueteo sutil que nunca llega a concretarse.
¿Por qué ocurre la micro-infidelidad?
Según Burrets, algunas personas micro-engañan de manera intencional, especialmente si tienen un historial de traspasar límites sin consecuencias. Otras lo hacen inconscientemente, buscando llenar vacíos emocionales o de autoestima, sin darse cuenta del daño que provocan. “Aunque podría deberse a algo insatisfactorio en la relación, también puede reflejar carencias personales de quien incurre en estas conductas”, afirmó.
La psicóloga y experta en relaciones Wendy Walsh añade una perspectiva evolutiva: “Los seres humanos, en cualquier cultura, tienden a mantener en su mente una ‘pareja de respaldo’, alguien a quien acudir si su relación actual falla”. Esta predisposición natural puede hacer que ciertos actos de micro-infidelidad pasen inadvertidos o se normalicen.
Impacto en las relaciones de pareja
La micro-infidelidad puede deteriorar la calidad de la relación principal de varias maneras. Burrets advierte que recibir atención de otras personas, especialmente cuando hay novedad, genera un “golpe de dopamina” que puede volverse adictivo. “Si ponemos nuestra energía fuera de la relación, existe el riesgo de descuidar el vínculo primario”, sostuvo.
Las reacciones ante este fenómeno varían: mientras algunas personas consideran el coqueteo como algo trivial, otras lo viven como una amenaza real. Para Walsh, este tipo de comportamiento puede “erosionar la confianza y el sentido de seguridad” en la relación, y a largo plazo, ponerla en riesgo de ruptura.
Particularidades en las relaciones LGBTQ+
En el contexto LGBTQ+, en el que las parejas a menudo enfrentan presiones sociales adicionales y desafíos de validación externa, la micro-infidelidad puede tener efectos aún más intensos. “Las personas LGBTQ+ no solo luchan por construir relaciones sólidas en un mundo que no siempre las respalda, sino que también deben lidiar con dinámicas de confianza más frágiles, donde la sensación de amenaza puede amplificarse”, señala Walsh.
En muchas parejas LGBTQ+, las conversaciones sobre límites y exclusividad adquieren una importancia vital, dado que los modelos tradicionales de relación no siempre se aplican de manera directa. La micro-infidelidad, si no se aborda a tiempo, puede reforzar sentimientos de inseguridad o rechazo que ya existen en un entorno social a veces hostil.
¿Cómo prevenir la micro-infidelidad?
Los expertos coinciden en que la prevención comienza con el diálogo abierto. Es crucial definir, desde el inicio de la relación, qué significa para cada persona la exclusividad y qué comportamientos consideran inapropiados.
Si ya existe una sospecha de micro-infidelidad, Burrets recomienda abordar el tema en un tono proactivo y curioso, no acusatorio. “El silencio puede interpretarse como permiso. Expresar nuestros sentimientos con afirmaciones en primera persona ayuda a evitar la confrontación directa”, aconsejó Walsh.
Por ejemplo, en lugar de recriminar, se puede decir: “Cuando vi que le diste ‘me gusta’ a esas fotos, sentí inseguridad sobre nuestra relación. Me di cuenta de cuánto te valoro”. Este enfoque favorece la empatía y la apertura al cambio.
¿Puede escalar hacia una infidelidad completa?
Aunque no siempre desemboca en una infidelidad formal, la micro-infidelidad puede ser una ruta peligrosa, especialmente si el comportamiento satisface necesidades insatisfechas en la relación principal. “Cuanto más se obtenga gratificación a través de esos actos, más probable es que se repitan y escalen”, advirtió Burrets.
En definitiva, reconocer y abordar a tiempo estas señales sutiles resulta esencial para proteger y fortalecer las relaciones, en todas sus expresiones de amor.
