Es frecuente que las celebraciones y festejos estén acompañadas con burbujas
SAN JUAN, Puerto Rico
Por Amanda Díaz de Hoyo | Periodista de Vinos y Gastronomía
Hay diferentes burbujas para celebrar esta temporada y con esta variedad nos beneficiamos como consumidores, porque entre tantas opciones siempre encontramos la que mejor se adapta a nuestro presupuesto.
Por lo general, es frecuente que las celebraciones y festejos estén acompañadas con burbujas. Para muchos, el mero hecho de que el vino blanco tenga burbujas lo hace champán. Para quienes cuentan con un poco más de experiencia reconocen los tres espumosos muy clásicos: champán, hecho en la apelación francesa de Champagne en Francia; el cava español; y el Prosecco italiano. Sin embargo, estos no son los únicos espumosos y aquí repasamos las burbujas que ofrece el Viejo Mundo y las del Nuevo Mundo.
Francia: su apelación más conocida para el vino de celebraciones es Champagne. En esta zona se han hecho grandes aportaciones enológicas al mundo entero, aparte de encontrar ahí bendiciones en la climatología, los suelos y las cepas, nos topamos con el vino de mayor reconocimiento en el mundo: el champán. Tradicionalmente se elabora con las cepas Chardonnay, Pinot Meunier y Pinot Noir. Fueron los franceses quienes establecieron el método tradicional o champenois, en el que dentro del proceso de elaboración se da una segunda fermentación en botella. Se clasifican los champanes según el contenido de azúcar: Brut Nature, Extra Brut, Brut, Extra-sec, Demi-sec, Doux. Se clasifican por añadas, Non-vintage o Vintage en caso de años excepcionales; por estilo, rosé, Blanc de Noirs, Blanc de Blanc; si es el top de la casa, como los Cuvée Prestige; y hasta por clasificación regional, Gran Crú, Premier Crú.

Sin embargo, hay otras zonas en Francia que producen vinos blancos espumosos, los crémant, qué tienen menos burbujas que el champán. Pueden provenir de Alsacia, Borgoña, Limox, y del Valle del Loira. En este valle también se producen otros espumosos que se reconocen con el nombre de sus denominaciones o apelaciones de origen: Saumur Mosseux y Vouvray.
España: En Puerto Rico conocemos muy bien el cava, un espumoso que se elabora mediante el método tradicional y con las cepas Viura, Parrellada y Macabeo. Su denominación de origen es la zona del Penedès en Cataluña, pero en otras zonas de España se elaboran cavas con la denominación de origen protegida. Algunas son el País Vasco, La Rioja, Extremadura, Navarra, Valencia y Aragón. En Galicia se producen deliciosos Albariños espumosos utilizando también el método tradicional.
Italia: de Italia provienen vinos espumosos como el Prosecco, el Asti Spumante, el Lambrusco y el Franciacorta. También en Toscana, producen espumosos con el método tradicional y en el norte, el Franciacorta, siguiendo también este método.
Alemania: Su espumoso se conoce como Sket, y los alemanes son grandes consumidores de espumosos.
El Nuevo Mundo cuenta con muchas opciones para el paladar. Veamos.
Australia: Producen espumosos blancos, rosés y tintos. Usan mayormente el método Charmant para los espumosos económicos y el método tradicional para los más selectos.
Nueva Zelanda: producen espumosos en todas las zonas productoras pero se destacan Hawkes Bay, Gisborne y Marlborough, donde hay mayor producción y usan el método tradicional.

Sudáfrica: El grupo de productores de espumosos se denomina The Cap Classique Producers Association, aunque para producirlos no es requisito indispensable formar parte de ello. Los espumosos se conocen como Cap Classique y se elaboran con el método tradicional, con las mismas cepas pero cultivadas en Sudáfrica.
Estados Unidos: Se producen espumosos en los estados de Washington, Oregón y California. En California encontramos mucha influencia francesa con casas como Domain Carneros, que forma parte de Taittinger.
América del Sur: Argentina tiene una amplia tradición en la vitivinicultura y produce espumosos blancos, tintos y rosados, lo mismo sucede con Chile. A estos productores le añadimos Uruguay y Brasil, que también están incursionando en la elaboración de espumosos por exigencias del consumidor. De hecho, el renglón de los espumosos sigue siendo muy atractivo para los consumidores mundiales.
Eso sí, la cultura del vino incluye la moderación en su consumo y en el caso de los espumosos es mejor, tomarlos con prudencia porque se suben más rápido por el bióxido de carbono. Siempre responsables, por favor.